Encuentro organizado por el Club 2CV de Zamora junto a la coordinación de D. Gabriel Rubio Carretero y en la que gustosamente participamos. Destacar las explicaciones de la guía, Julia Sendín, sobre el arte e historia del municipio como su comarca.
De nuestro club participaron 5 socios, aunque el nuevo vehículo de nuestro «Presi» tuvo una avería. Concretamente a su dyane se le quemó el alternador junto a la Central Nuclear de Juzbado. Ante esta situación le esperamos en Ledesma mientras regresaba triste a Salamanca con su dyane al no poder continuar el trayecto y cambiar de vehículo.
Nosotros aprovechamos este contratiempo para visitar los bares y tomar unos pinchos y ya estábamos haciendo apuestas con que coche vendría Fermín, ¿quizás con el 2CV gris, el charleston o sería capaz de traer su CX? Nos llama al móvil para decirnos que nos espera a la salida del pueblo para continuar viaje. 
Nos quedamos a cuadros. Se ha traído otra vez el Dyane. ¡Pero está loco, si tenía el alternador quemado! Finalmente nos explica que prefirió cambiar el alternador por otro, ya que tardaba el mismo tiempo que sacar el 2CV del garaje. jajajaja
Ya todos juntos continuamos viaje sin ningún contratiempo, bueno, salvo una parada que hicimos en la presa todos juntos como recuerdo.
Por fin, y con dos horas de retraso llegamos a la plaza de Fermoselle. Allí nuestros amigos del Club 2CV de Zamora, con una paciencia envidiable, nos esperan. Hemos de reconocer de que tuvieron la amabilidad de no empezar la visita por el pueblo y la comarca hasta nuestra llegada y por eso desde aquí -públicamente- se lo agradecemos.
Ya todos juntos, y pidiendo disculpas por nuestro retraso, nos sacamos una fotos junto a los coches. Destacar el chevrolet de D. Gabriel Rubio Carretero, con una restauración envidiable. Hay que decir que el Ayuntamiento de Fermoselle tuvo la amabilidad de restringir el tráfico en el municipio y que los habitantes aplaudieron a todos los participantes y vehículos del encuentro.
Todos sabemos que Fermoselle es un pueblo con encanto, sus edificaciones, bodegas, calles estrechitas…. pero el que una chica, Julia Sendín, nos explicara centímetro a centímetro el pueblo e incluso algunas bodegas particulares fue algo que nunca olvidaremos. Es una pena que no exista mucha participación en estos eventos culturales y sobre todo porque no es lo mismo ver un bonito pueblo y su comarca uno solo que con alguien que te lo explique, y en este caso nuestra guía con una excelente amabilidad.
Después de visitar el pueblo, subir a lo alto de un mirador, ver interesantes edificaciones de granito, explicadas por Julia Sandín, regresamos a la plaza. Recorrimos las callejuelas del pueblo con nuestros vehículos dando la nota con los claxon y salimos hacia la Cicutina y la Garganta de los Arribes del Duero. ¡Qué precioso recorrido, con subidas y bajadas llenas de curvitas!
Lástima que fuera ya la hora de comer, por lo cual regresamos a Fermoselle, aparcamos los vehículos en la plaza, nos despedimos de nuestra guía Julia y comimos en un restaurante cercano del lugar. Allí, mientras comimos charlamos sobre los posibles eventos entre los que nosotros tenemos previsto asistir a Escaló (puente de la Constitución) e ir preparando la cena de Navidad que será el día 17 de diciembre y el lugar por determinar.
Finalizo esta concentración, nos dirigimos a la presa de la Almendra donde nos sacamos unas fotos, nos despedimos de nuestros amigos de Zamora y regreso a casa.